Algo digno de compartir: no falto nunca la poesía, el baile, la música, la familia, los niños, los abuelos, los padres, hasta el perro y el gato fue un digno invitado de honor para el evento. Un cierre a lo grande, con la gente, en la calle, como le gusta al VIENTO
No hay comentarios:
Publicar un comentario